El tétanos generalizado es una enfermedad grave del sistema nervioso causada por una bacteria productora de toxinas, no hay cura; el tratamiento se centra en controlar los síntomas y las complicaciones hasta que desaparezcan los efectos de la toxina del tétanos.
La manera de infección es a través de una lesión contaminada, la bacteria puede sobrevivir en estado latente en la tierra, óxido, polvo, estiércol y heces o saliva de los animales. Esencialmente, se vuelve inactiva hasta que descubre un lugar para desarrollarse.
Algunos signos y síntomas del tétanos generalizado son: espasmos musculares dolorosos y rigidez muscular en la mandíbula, cuello y espalda, dificultad para tragar, alteración de la presión arterial, taquicardia, fiebre y sudoración extrema.
El tétanos es prevenible por vacunación, siendo un medio eficaz y asequible, cuando hay un corte profundo o lesión extensa por quemadura, es necesario valorar si el esquema esta actualizado o la necesidad de un posible refuerzo.