La hepatitis B es una infección vírica del hígado de presentación crónica, generalmente ocurre cuando el virus se transmite de madre a hijo durante el parto o en la primera infancia de niños infectados a niños sanos, y de presentación aguda a través del contacto con sangre, saliva, semen u otros líquidos corporales durante las relaciones sexuales con una pareja infectada, reutilización de agujas, jeringas u objetos cortantes contaminados; ambas presentaciones pueden ocasionar cirrosis, insuficiencia hepática o cáncer de hígado.
El virus de la hepatitis B puede sobrevivir fuera del cuerpo durante al menos 7 días pudiendo infectar si ingresa al organismo, el periodo de incubación del virus de la hepatitis B oscila entre los 30 y los 180 días y es detectable entre 30 y 60 días después de la infección.